

Los pensamientos, debidamente nutridos e
interiorizados, serán una realidad en tu
mundo físico. Los pensamientos tienen un
poder extraordinario.
Sólo podemos dar a los demás lo que tenemos
dentro de nosotros.
Todo tu comportamiento es el resultado de
los pensamientos que lo han precedido.

Para poder cambiar tu experiencia vital es
preciso que cambies tus pensamientos,
tus actitudes, así como
tus creencias respecto a la vida, y éste es
un proceso interior. La realidad externa es
un reflejo de tu yo interno y de tus
convicciones actuales. Al ampliar tu
conocimiento interior, tus creencias
respecto al mundo cambiarán. Si cambias
tus creencias, se transformarán también
tus experiencias vitales.

Nuestras creencias, son la parte
fundamental de nuestra vida. Lo que
creemos, se manifiesta; nuestros
pensamientos son órdenes que serán
obedecidas y las veremos reflejadas
en nuestra vida como experiencias.
Si piensas en miedo, en carencias,
en desamor y fracaso, actuarás como
un imán para ello, atrayéndolo de
manera natural, instantánea,
convirtiéndose en tu realidad inmediata.

Exactamente lo mismo pasa cuando pensamos
en dinero, amor o éxito, éstos vendrán
de manera fácil, casi sin buscarlos
provocando milagros diarios en nuestra
vida. Los pensamientos del presente,
crean nuestro futuro.
El pensamiento y las palabras van juntos,
ambos contienen vibraciones energéticas
que atraen lo que llaman, sucesos de
la misma calidad de sus vibraciones.
Los pensamientos son sólo eso, y pueden
cambiarse, nosotros tenemos el poder
de hacerlo, es sólo una programación.

La mayor parte de nuestras creencias y
pensamientos, nos han sido heredados de
nuestros padres y de nuestra sociedad
desde la niñez.
Ahora es tiempo de hacer un análisis y
hacer una selección, de todas tus creencias
¿cuál sigue vigente? ¿Cuál funciona
en esta etapa de tu vida?
Si cuando eras niño aprendiste que "no había
que confiar en los extraños" ¿Crees que esa
creencia es útil para ti en este momento?

Si tuvimos la suerte de vivir en un hogar
lleno de amor, de unión y felicidad,
¡tenemos parte del camino ganado! y
habrá poco que restaurar. Pero si
pertenecemos a una familia agresiva, que
nos repitió incontables veces "Eres
un inútil" "Nadie se va a fijar en ti"
"El éxito es para los ricos" "Los hombres
no lloran" etc., o si piensas que no
sirves para el estudio? ¿Por qué tu
maestra de primero te dijo que eras
malísimo en las matemáticas?
entonces te darás cuenta,
que una gran lista de estas ideas limitantes
están construyendo tu realidad actual y que
aparte tienes que luchar contra una gran
dosis de resentimiento, culpa y rencor, no
sólo hacia tu familia, sino también hacia
ti mismo y hacia el mundo entero.

El tiempo pasa, nuestra vida se modifica y
no tenemos porque seguir caminando al
ritmo de nuestros pensamientos de la
infancia. Ya no pertenecen a nuestra actual
etapa de madurez y evolución.
Cuando logramos detectar la raíz de nuestros
problemas estamos dando un gran paso,
estamos a la mitad del camino, ahora solo
nos queda sustituir el pensamiento que
teníamos por uno POSITIVO, por uno útil a
nuestra vida... vale la pena intentarlo.

No te dejes atrapar por el torbellino de
los cambios y los sucesos externos. Busca
quién eres realmente en el interior de esa
sólida base de saber. Con la calma y con la
paz del conocimiento interior podrás, serena
y airosamente, emprender con éxito los
períodos de cambio. Si así lo haces, podrás
ser, durante esta maravillosa época de rápida
expansión, crecimiento y cambio, una luz de
amor y entendimiento para la humanidad.
Recuerda: "Lo que crees lo creas".

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